Carta de presentación para prácticas: qué es y cómo se escribe

Todo lo que debes saber sobre tu carta de presentación para prácticas

Tu currículum cuenta lo que has estudiado, pero una carta de presentación (también llamada cover letter) cuenta quién eres. Este documento no es solo un trámite; funciona como una introducción personal que acompaña al CV para “romper el hielo” con los reclutadores antes incluso de la entrevista.

Tu arma secreta para conseguir prácticas: conseguir esa primera oportunidad en plantilla puede ser difícil cuando no tienes mucha experiencia. Ahí es donde entra en juego la carta de presentación para prácticas. Es tu espacio libre para brillar, donde puedes detallar tus aspiraciones, explicar por qué encajas en su cultura y añadir detalles técnicos (como la referencia de la oferta) que en el CV quedarían fuera de lugar.

Si todavía no tienes claro dónde termina uno y empieza el otro, aquí te explicamos las diferencias clave entre currículum y carta de presentación.

Crear mi carta

Cómo hacer una carta de presentación para prácticas

Existen ciertos datos y rasgos específicos que los técnicos de selección esperan encontrar en una carta de presentación para prácticas bien redactada. Básicamente, están buscando a aquellos candidatos que puedan ofrecer exactamente las competencias y cualidades específicas que necesitan en la persona perfecta para ese puesto.

Aunque es verdad que, por tu falta de experiencia, no vas a poder mencionar una gran cantidad de aptitudes profesionales, hay ciertos elementos que deberás incluir.

Entonces, ¿qué tienes que poner en tu carta de motivación para prácticas? A continuación te lo explicamos:

• La referencia de la oferta de empleo (suele ser el código de identificación que utilizan en una determinada plataforma web) o el nombre de la posición a la que aspiras (recuerda escribir el nombre del puesto tal y como aparece en el anuncio).
• Tu admiración por esa empresa en concreto, explicando brevemente su historia, su misión, su visión de negocio y todo aquello que te permita demostrar que conoces la compañía.
• Las razones que te han llevado a presentarte a esa oferta de trabajo en particular.
• Una cantidad razonable de competencias, habilidades o aptitudes, además de cualquier trabajo que hayas tenido, aunque no esté directamente relacionado con tu sector, siempre intentando utilizar las palabras clave que aparecen en la descripción de la oferta.
• Frases que te ayuden a explicar lo que puedes aportar a la empresa en caso de que te contraten.
• Información sobre la disponibilidad que tienes para incorporarte a tu nuevo puesto de trabajo, el tipo de jornada que prefieres o cualquier otra clase de cuestiones relacionadas con el horario del puesto que aparezcan en el anuncio.

Generalmente, la carta de presentación para prácticas se envía en formato Word o en PDF y siempre al mismo tiempo que el curriculum vitae, es decir, ambos documentos se adjuntan en la misma solicitud de empleo o en el mismo e-mail en el que vayas a contactar con el equipo de Recursos Humanos.

En este artículo te ofrecemos nuestros consejos y recomendaciones para saber concretamente cómo hacer una carta de presentación para prácticas, pero si estás buscando consejos generales sobre qué es una carta de presentación y cómo redactarla, te invitamos a consultar nuestra guía sobre cómo escribir una carta de presentación. Y si lo que estás buscando son casos prácticos, echa un vistazo a nuestros ejemplos de carta de presentación y escoge el que más se adapte a tus necesidades.

Tres consejos para escribir una carta de presentación para prácticas

1. Mientras que un curriculum vitae puede analizarse de manera individual, la carta de presentación para prácticas no es un documento aislado. Por eso, deberás tener siempre en mente que es un complemento de tu CV, por lo que no deberás repetir la misma información que aparece en él ni incluir todos los datos sobre tu trayectoria. Aquí tienes un ejemplo de CV para prácticas, para que sepas a qué nos referimos.
2. Si vas a presentarte con una autocandidatura debes ser claro desde el principio. Ese grado de motivación extra será percibido como una muestra de tu personalidad y te presentará como un candidato determinado y valiente.
3. Tu carta de presentación para prácticas no debe superar una página de longitud. Por eso, deberás dedicar unos minutos a sintetizar toda la información que quieras incluir para respetar ese límite. La clave está en encontrar el equilibrio justo entre todos los elementos que quieres mencionar, intentando resumir cada párrafo al máximo.

¿Qué poner en una carta de presentación para prácticas sin experiencia?

Si quieres solicitar un puesto de prácticas o una beca, es muy probable que aún no tengas experiencia profesional previa, a excepción de algún trabajo temporal que puedes haber tenido para sacarte un dinero extra o para comprarte algo especial. De camarero, niñera, animador, personal de catering… Pero no hace falta que lo menciones en tu carta de presentación para prácticas: esta información no aporta un valor añadido y puede resultar hasta fuera de lugar. Te recomendamos mencionarlo brevemente en tu curriculum vitae, explicando cuáles eran las tareas que realizabas en cada uno y las habilidades duras y blandas que has adquirido y que pueden resultarte útiles para tus prácticas.

Eso sí: intenta que los trabajos temporales que vayas a mencionar estén relacionados mínimamente con las prácticas a las que quieres optar. Y recuerda: todos hemos tenido un primer trabajo alguna vez, así que solo tienes que compensar tu falta de experiencia con otros factores igual de importantes.

Al contrario que tu currículum, tu carta de presentación para prácticas no es el lugar donde tienes que enumerar cada una de tus experiencias anteriores: se trata más bien de hacerle entender al reclutador cuáles son tus planes para el futuro y cuál es tu actitud ante el trabajo. Por norma general, en tu carta de motivación para prácticas o para una beca, debes centrarte sobre todo en tus competencias transversales, es decir, aquellas que has adquirido y que pueden aplicarse en distintos ámbitos o puestos de trabajo, como por ejemplo:

• Resolución de problemas
• Capacidad para trabajar en equipo
• Enfoque analítico
• Organización
• Creatividad
• Actitud positiva
• Capacidad para trabajar bajo presión
• Cumplimiento de plazos
• Habilidades comunicativas
• Capacidad de escucha
• Proactividad

Como es lógico, estas habilidades interpersonales pueden cambiar dependiendo del tipo de trabajo que quieras solicitar: alguien que aspira a ser diseñador gráfico deberá destacar la creatividad, algo que no será particularmente necesario en la carta de presentación para prácticas de un economista. En nuestro artículo sobre habilidades para un currículum podrás encontrar cientos de ejemplos que te ayudarán a elegir cuáles son tus cualidades más destacadas. Si aún no has terminado tus estudios y quieres optar a unas prácticas de estudiante, es decir, que cuando termines este periodo volverás a estudiar para terminar la carrera o el máster, es importante que, aparte de tus competencias interpersonales, des más detalles sobre tu formación, ya sea el curso de la carrera en el que estás o cuál es la especialización que estás realizando. Esta información puedes incluirla tanto en tu currículum como en tu carta de presentación para prácticas de manera detallada. Ten en cuenta que este consejo aplica especialmente si eres estudiante de medicina, enfermería o cualquier otra especialidad del ámbito sanitario, así como en la rama de la educación o el derecho, ya que necesitarás dejar constancia de que has conseguido los créditos necesarios para completar tus estudios.

¿Cómo escribir un e-mail para optar a unas prácticas?

La costumbre de escribir cartas de presentación empezó en la época en la que se entregaban los currículums en mano, visitando de manera presencial las instalaciones de la empresa en la que queríamos trabajar. En ese momento, se dejaba el CV en recepción y los técnicos de Recursos Humanos no tenían ningún contacto con el aspirante. Por eso se empezó a adjuntar una carta que hablara sobre el candidato y que le ayudará a presentar su currículum para que la persona que lo leyera conociera su perfil en detalle.

Hoy en día, ya quedan muy pocos trabajos en los que se presenta el currículum en mano; es algo que ha quedado pasado de moda. Todos los trámites se realizan de manera digital; se crea el currículum online y se envía por correo electrónico, ya sea por LinkedIn o en el portal de empleo donde has visto publicada la oferta de empleo. Solo tienes que cargar tu currículum y tu carta de presentación desde tu ordenador y darle al botón de “Enviar”. En general, la carta de presentación para prácticas profesionales debe ser un documento aparte, pero esto no se aplica en los tres casos que te explicamos a continuación:

• Si en la solicitud de empleo no hay un apartado específico para incluir una carta de presentación y solo te deja subir un documento, es decir, tu currículum.
• Si estás optando a una posición de cualificación media-baja y crees que una carta de presentación más extensa no es necesaria para conseguir el puesto.
• Si vas a enviar tu candidatura por e-mail directamente al equipo de Recursos Humanos de la empresa.

En ambos casos no será necesario que redactes una carta de presentación para prácticas: será suficiente con utilizar el cuerpo del e-mail o la casilla que te permita añadir información adicional en tu solicitud de empleo para hablar sobre tus motivaciones para optar a un puesto en prácticas. A pesar de no ser una carta como tal, tómatelo como si lo fuera: utiliza un formato alineado a la izquierda para que suene más natural e incluye todos los elementos que hemos visto hasta ahora: saludo o introducción, cuerpo del mensaje y conclusión. Una vez hayas redactado este mensaje, solo tendrás que adjuntar tu curriculum vitae.

Cómo finalizar tu carta de presentación para prácticas

En el ejemplo que hemos visto más arriba, observamos que Enrique se despide educadamente de la persona que esté leyendo su carta de motivación para prácticas y le da las gracias por el tiempo que le ha dedicado. No le da ningún tipo de ultimátum ni le presiona de ninguna forma para recibir una respuesta. Además, es muy importante que termines tu carta con tu firma e incluyas tu nombre y apellidos. De esta manera, en caso de que impriman tu carta y se traspapele entre tantos documentos, podrán saber de un vistazo a quién pertenece y valorar tu carta junto a tu curriculum vitae.